Cada noche recordaba la historia que tenia en su misteriosa caja.
Nadie podría entenderla tanto como ella, se acercarían pero al escucharla se asustarían, por ello decidió dejar de contarla, era completamente para ella.
Cierto día, cuando la luna iluminó cada uno de los tejados de la ciudad Annie volvió a abrir su caja, pero la historia había desaparecido, no quedaba rastro de su brillo... ¿como era posible que no estuviera?
Después de haberla leido tantas veces se dió cuenta que solo recordaba el dolor que le había producido,que la recordaba para alentar a su corazón de algo con lo que había convivido,con una historia dulce pero amarga para su recuerdo.Que pena olvidar aquello que le hacía reir por cada capítulo que pasaba,que le hacía llorar en su punto final.
Puede que la luna se cansara de iluminar aquellas lágrimas y decidiera borrar ese recuerdo convirtiéndolo en algo bello.
Iluminar una nueva historia encima de los tejados.
